dilluns, 18 d’abril del 2011

pasado

Vemos el pasado como el agua del río que se va, una corriente que se lleva consigo los errores de juventud, los amores perdidos, las adicciones a las que sucumbimos, o las oportunidades que desaprovechamos, pero tarde o temprano vuelven flotando a nuestra vida recuerdos de los errores en los que caímos, y los pecados que cometimos.